martes, 20 de mayo de 2014

El lenguaje del caballo

   Los caballos utilizan diferentes partes de su cuerpo junto con los sonidos para comunicarse, conviene saber qué quiere decir con cada uno de estos lenguajes:

 Las orejas: muestran el estado de ánimo del animal:

Lánguidas y caídas: significa que el caballo no se encuentra a gusto o se encuentra enfermo.  También es un síntoma de sumisión.

 -Erguidas y en movimiento: estado de vigilancia.

-  - Enderezadas y giradas hacia delante: existe algo que le llama la atención.

 - Verticales: significa desconfianza.

-   - Una oreja hacia delante y otra hacia detrás: duda (puede no haber comprendido algo de lo que se le está intentando transmitir durante la doma).

 La Cola: símbolo de energía, sus movimientos también avisan sobre el estado del caballo:
-      En alto: señal de alegría.
-      Entre las ancas: sugiere desconfianza.

 Los Sonidos: a pesar de que el caballo no emite muchos sonidos, debe saberse qué significa cada uno de ellos:

-   Bufido: cuando el caballo expulsa aire por su nariz, es símbolo de contento.

-   Mugido: indica temor o desconfianza ante algo que no conoce.

-  Gruñido: señal de dolor.

-  Chillido: normalmente es breve y agudo, y suelen ser las hembras quienes lo emitan, para manifestar su mal humor (casi siempre cuando se encuentran delante de otra yegua).

-  Relinchos: existen multitud de ellos, pero los más comunes son producidos por nerviosismo o cuando un caballo es apartado del resto de la manada, para llamar a sus compañeros.


viernes, 9 de mayo de 2014

Premios y castigos para los caballos


El sistema de premios y castigos es el más comúnmente utilizado para los caballos. Se basa en asociar determinados comportamientos a sensaciones agradables o desagradables, que motiven al caballo a mejorar su conducta.


Hay que tener en cuenta es que un caballo puede aceptar un castigo si entiende su porqué; pero nunca lo aceptará sin que se le de una "explicación" (relacionarlo con un comportamiento indebido) y puede llegar a rebelarse. Además, para que un caballo relacione una acción como correcta o inadecuada, el premio o el castigo deberá ser aplicapo de forma inmediata.





Premios:
Golosinas: que no deberán ser dadas al caballo sin ton ni son, ya que acabaría por ser un vicio. Se deben reservar únicamente para agradecer una buena conducta y ofrecerse sólo de forma esporádica.
Descansos: son el premio óptimo después de haber realizado un ejercicio que haya resultado duro o peligroso para el caballo.
- Ofrecer seguridad y tranquilidad: para ello hay que mostrarse firme pero tranquilo, un domador que grita o que hace movimientos bruscos puede hacer desconfiar al caballo. De ahí la importancia de que se utilice una voz tranquilizadora, teniendo en cuenta que este animal es enormemente sensible al ruido.
Imitación de comportamientos equinos: realizar movimientos que desarrollan estos animales cuando están en manada puede resultar enormemente gratificante para el caballo. Algunos de éstos son:

1- Pasar un brazo por encima del cuello: ya que se está imitando el comportamiento de la yegua cuando protege a su cría y se le ofrece así una importante sensación de seguridad.
2- Rascarle detrás de la oreja: se imita los cuidados mutuos que se ofrecen los caballos.
3- Echar la respiración sobre el cuello o los ollares: otro cuidado mutuo entre estos animales.
4- Rascar.

- Acariciarle los puntos sensibles: cada caballo posee unos puntos especiales en los que le gusta ser acariciado, se les debe averiguar para utilizarlos como premio.

Castigos:

Gritos o voz fuerte: no se debe abusar de ellos ya que el caballo se podría acostumbrar, de forma que sólo obedecería ante ellos.
Lenguaje corporal: ponerse erguido, hacer gestos con los brazos.
Tirón sobre la nariz: debe ser breve pero firme.
Toques con la fusta o tralla: estos elementos deben utilizarse como ayuda, no para castigar al caballo ya que si les coge miedo huirá de ellas y no podrán utilizarse para dirigirlo. Para castigar con ellos se dará únicamente un toque breve y firme, pero nunca una paliza.
- Imitar castigos que realizan los propios caballos:
1.   Simular una coz, con un puntapié.
2.   Imitar un mordisco, con un golpe con el codo.

Por último conviene tener en cuenta que un castigo dado a tiempo evitará que pierda el control sobre el caballo, pero nunca este castigo deberá ser fuerte o causar daño al animal. 




jueves, 8 de mayo de 2014

Jugando con el caballo

Cuanto más avispado sea un caballo, más despierto será y más ganas tendrá de jugar. Esto indica además que se trata de un buen caballo para trabajar y que seguramente aprenderá con facilidad.

El juego reporta gran cantidad de ventajas, tanto para el domador como para el caballo:

 - Permite conocer mejor las características del animal. Durante el juego se podrán observar los movimientos que el caballo no desarrolla durante el trabajo cotidiano.

 -  Supone una motivación para el caballo. Eso sí, se debe dejar bien claro desde el principio qué es un juego, y qué es el trabajo (para ello se puede, por ejemplo, dejar al caballo suelto durante el juego y embridado cuando deba trabajar).

 -   El desarrollo de actividades de este tipo aumentan la capacidad de atención del animal ya que presta atención de una manera totalmente voluntaria.

 - El juego puede utilizarse además para entrenar la confianza del caballo; para ello se colocarán diferentes elementos que él puede considerar peligrosos (como por ejemplo una pelota), de los que en principio rehuirá pero al poco tiempo se podrá ver como se divierte con ellos. La libertad de poder huir ante una situación que le sugiere peligro y volver por su propia iniciativa es la mejor forma para hacerle perder el miedo. A esto se suma además que si durante todas estas situaciones el caballo se ve acompañado de su dueño, podrá llegar a perder el miedo ante cualquier situación si nota su presencia.

Consejos a la hora de jugar con el caballo:

 -     El domador debe llevar la iniciativa en todo momento, ya que de otra forma se podría ver en situaciones de peligro.
 -    No conviene jugar sin ir protegido ya que, aunque sea sin intención, el caballo puede causarle alguna lesión. El domador deberá llevar por tanto, fusta larga o tralla.
 -    El domador deberá evitar que el caballo se levante de manos, puede ser sumamente peligroso. En caso de que lo haga, deberá evitar echarse hacia atrás, ya que con ello lo único que conseguirá es que el caballo se de cuenta de que con este movimiento puede conseguir dominarle, con lo que lo podrá utilizar en otro momento.


miércoles, 7 de mayo de 2014

Los principales sentidos de un caballo





  • La vista: el caballo posee un campo visual muy amplio, que oscila entre 340º y 360º, con las siguientes características:
*      Dispone de un campo ciego, que le impide ver en línea recta delante de él, más allá de un metro.
*      La visión lateral con un sólo ojo no le permite percibir el relieve, por eso se le debe permitir girar la cabeza.
*      A pesar de que percibe mal los detalles, es muy sensible al movimiento.
*      Puede ver de noche.

 -  El oído: el sentido del oído en el caballo está muy desarrollado:

*      Puede escuchar sonidos imperceptibles para el hombre.
*      Sus orejas se orientan hacia el lugar en donde se origina el ruido.


  - El olfato: es también un sentido muy desarrollado. Pueden llegar a reconocerse por medio de este sentido, siendo el que utiliza el potro para buscar a su madre.

martes, 6 de mayo de 2014

Comportamiento social del caballo

El caballo es un animal con tendencia a vivir en manada, en un grupo social. 

Como cualquier grupo, una manada de caballos se estructura a través de unas reglas y una de las más importantes es la jerarquía.

Cada caballo tiene una posición dentro del grupo, que será importante conocer para poder definir las características de la doma que se necesitan realizar:

  • Las yeguas heredan su rango, no tienen que pelear por él, por ello se pueden mostrar hostiles entre ellas, ya que dos yeguas tienen siempre el mismo rango.
  • El macho debe luchar por alcanzar una posición privilegiada en la manada: esto le da un carácter mucho más duro y agresivo, lo que implica unas características que se deben tener en cuenta en la doma:
*      Su manejo para el trabajo es más difícil.
*      Se rebelan con facilidad. 
*      No aceptan las injusticias.

-   El semental jefe y la yegua jefa conviven al mismo nivel, sin disputarse ambos el rango.

-  El caballo de rango máximo (líder) puede echar a cualquier otro caballo del sitio en donde estén, sin ningún tipo de razón.

 El caballo que tiene un rango inferior, no puede pasar por delante de otro con mayor rango. Irá por detrás y lo hará sin quejarse. Esto hace que, en situaciones de peligro, la manada no se disperse; el caballo de rango superior marca la dirección y el resto le sigue.

-  Los potros también seguirán a las madres sin separarse jamás de ellas.

-  El caballo de rango superior puede empujar a otros, lo hace con objeto de que la manada no se separe y además para rechazar a sementales jóvenes que comienzan a imponerse. Esta es la razón por la que el caballo obedece al jinete, ya que al quedar fuera de su espacio visual, para el caballo es como si el jinete fuera el semental que le está empujando.

Esta jerarquía existe en cualquier raza de caballos y es aceptada por todos sus miembros.



lunes, 5 de mayo de 2014

Plantas naturales que mejoran la salud de los caballos

Cada vez resulta más recomendable el uso de plantas naturales para la curar determinadas enfermedades en los seres humanos Y esta práctica también puede aplicarse a los caballos. De hecho son muchas las plantas que se utilizan como remedio para diversos problemas de salud de los equinos.

Es importante tener en cuenta que son bastante fáciles de obtener en el supermercado e incluso en la propia casa y, sobre todo, que no tienen efectos secundarios.

Estas son algunas de las plantas más comunes que pueden ofrecernos notables beneficios:

Ajo: quizás sea el elemento natural más utilizado por los cuidadores. Dos o tres dientes de ajo partidos en
trocitos y añadidos a la comida del caballo ayudan a prevenir constipados y estimulan de manera notable el sistema inmunológico del caballo.

Hojas de té (secas o frescas): adecuadas para tratar cólicos y diarreas. Las más efectivas son las hojas de té verde, pero también las de la manzanilla o la hierbabuena.

Raíz de valeriana: reconocida por su efecto calmante, puede ser utilizada para relajar a caballos muy nerviosos, irritables y/o estresados.

Salvia cocida: ayuda a curar problemas de mastitis. Deberá ser añadida al agua de beber de la yegua recién parida.

miércoles, 30 de abril de 2014

Qué hacer si tu caballo suda sin motivo




El caballo transpira para regular su temperatura corporal durante el ejercicio; otros cuadrúpedos ejercen esta función a través del jadeo o las almohadillas de las patas. De hecho, es bueno que los caballos suden de vez en cuando, ya que si no lo hiciesen presentarían bajo rendimiento y problemas de respiración.  En ocasiones los caballos presentan un sudor blanquecino y con espuma: no es señal de problemas físicos pero sí indica una falta de entrenamiento.

Posiblemente alguna vez habrás encontrado a tu caballo cubierto de un sudor frío tras regresar del trabajo. Tú has procedido correctamente: le has secado bien y le has dejado a cubierto, pero aún así al regresar a la cuadra lo encuentras completamente sudado. 
Esta es una situación que debemos evitar, puesto que el sudor puede ser el causante de múltiples complicaciones. Para ello procuraremos que el caballo regrese siempre a la cuadra fresco y calmado. Si observas que aún está fatigado, camina un poco con él hasta que se calme.


Ten en cuenta que estos ataques de sudor son siempre consecuencia de un estado nervioso que puede venir provocado por múltiples razones, las más comunes son la preocupación por el trabajo o por la actitud del jinete para con el caballo. 

Por eso, en caso de que tu animal tenga tendencia a este tipo de ataques, procura vigilarle durante el trabajo, no seas demasiado severo con él, no le produzcas estrés.

Antes de guardarlo en su cuadra, asegúrate de que está totalmente seco y caliente, dale un poco de heno y déjale solo para que se tranquilice (comprobando de vez en cuando su estado).